El Dios De La Intemperie / Armando Rojas Guardia
Información de la tienda

Tienda oficial de Mercado Libre
- 100%
de compradores lo recomiendan
- 4 años
vendiendo en Mercado Libre
- 163
ventas concretadas


Características principales
Título del libro | El Dios de la intemperie |
---|---|
Autor | Armando Rojas Guardia |
Idioma | Español |
Editorial del libro | El Nacional |
Otras características
Tipo de narración: Ensayo
Descripción
Armando Rojas Guardia es uno de los poetas contemporáneos venezolanos más importantes de este tiempo y un lúcido ensayista. Autor de los libros de poemas: Del mismo amor ardiendo, 1979; Yo que supe de la vieja herida, 1985; Poemas de Quebrada de la Virgen, 1985; Hacia la noche viva, 1989; La nada vigilante, 1996; Antología poética, 1992; El esplendor y la espera, 2000; Obra poética reunida, 2005; Patria y otros poemas, 2008; Fuera de tiesto, 2008; Mapa del desalojo, 2014. También ha publicado los ensayos: El Dios de la intemperie, con varias ediciones, 1985, 2003, 2004, 2006, 2008; El Calidoscopio de Hermes, 1989; Diario merideño, 1991; Qohelet y la moral provisional. El principio de la incertidumbre, 1994; Crónica de la memoria, 1999; Obra de ensayo reunida, 2006. Su único cuento conocido es Proserpina, Ediciones La Guayaba de Pascal, se publicó en el 2014 por primera vez.
Estas notas fragmentarias y sin embargo sabiamente entretejidas de Armando Rojas Guardia, además de estar escritas desde adentro, desde la más encendida tensión psíquica, escritura realmente quemante, transmiten el resplandor de lo literario fundido, aunado, con la vida…
…Constituyen una escritura en la que cada fragmento se relaciona interiormente con el todo, en la que el todo se constela. Coherencia fragmentada. Estamos ante una escritura orgánica, ante un organismo vivo de escritura, que respira, se mueve, palpita, se contrae, y se expresa. Los textos brotan de una meditación activa, no contemplativa y son reflexión y creación, fundamentalmente encuentro, resonancia interior, despojamiento y signo. Lo aquí sucedido, lo que va sucediendo a medida que leemos, no le es dado sino a quien pasó (o pasa) por este éxodo, por este nomadismo que implica el desamparo de los campamentos efímeros, la sucesión de paisajes, la constante salida, el rechazo a encerrarse o a ser encerrado, aunque sea a costa de sentirse seguro, resguardado, protegido.
Juan Liscano