Entrega a acordar con el vendedor

San Cristóbal, Táchira

¡Última disponible!

Información sobre el vendedor

Este vendedor no tiene buena reputación en el sitio

Ver más datos de este vendedorSe abrirá en una nueva ventana

Características del producto

Características principales

Título del libro
Diablo al que le Llaman Tren, un
Subtítulo del libro
Diablo al que le Llaman Tren, un
Autor
Javier Ortiz ·
Idioma
Español
Editorial del libro
Fondo de Cultura Económica
Edición del libro
1
Tapa del libro
Blanda

Otras características

ISBN
9789588249292

Descripción

LIBRO NUEVO -ORIGINAL - NO VENDEMOS COPIAS. SI ESTÁS EN SAN CRSITOBAL PUEDES PAGAR Y RETIRAR EN TIENDA FISICA UBICADA EN EL CENTRO (EL LIBRO SE IMPORTA DESDE COLOMBIA)


El 20 de agosto de 1894, el poeta José Asunción Silva viajó en el recién inaugurado ferrocarril Cartagena-Calamar. Al día siguiente, desde Cartagena, escribió una carta a su madre y a su hermana en la que lo describió como una cosa de otro mundo puesta por encanto en ese lugar. Un diablo al que le llaman tren cuenta, apoyado en un amplio acervo de fuentes documentales y gráficas, la historia de ese animal jadeante que con su silbato festivo pretendía despertar a la ciudad de Cartagena de Indias de una modorra de siglos. A través de fuentes testimoniales, el libro reconstruye vívidamente la forma en que los habitantes de los pueblos de la línea se embarcaron a su manera en la locomotora del progreso. Unos años antes que Silva, su colega Rafael Pombo había dicho que el tren era un pueblo entero vestido de caballero en caravana rodante que se tragaba el horizonte como un rinoceronte de hierro. Eran tiempos en que la modernidad hacía ruido. En estas páginas, el lector también encontrará la historia de las políticas ferroviarias en el país, sus aciertos y fracasos, la imagen icónica de una bestia acezante que atravesaba la geografía nacional como símbolo de desarrollo, la nostalgia que dejó el desmonte de los principales trenes de la nación y la realidad postrera de estaciones abandonadas, locomotoras cubiertas por el óxido y tramos de rieles perdidos entre la manigua.

Preguntas y respuestas

Nadie ha hecho preguntas todavía. ¡Haz la primera!